Vuelvo a casa caminando de puntillas, no vaya a ser que se despierten los poetas.

15 jul 2013

Bar de carretera al final del pasillo

He metido en un sombrero
más de un centenar de papeles
y quiero que cojas uno.

Allí es donde iremos de vacaciones.

Ha salido "nuestras espaldas".
Nunca te confesaré que ponía
lo mismo
en todos los papeles.

Viaje de una noche sin mapas,
sin carreteras,
sin furgoneta.

Una cama y el motor mordiéndome la piel.

Volante en los dientes,
por el retrovisor te miro fijamente,
envidio a tu ropa
y a la marca que te dejan los calzoncillos
en la cintura.

El freno de mano, esta noche, acelera.

Bar de carretera al final del pasillo.
Cervezas frías en la encimera de la cocina,
fregadero mojado,
platos sucios.
Marchando una de rock y mordiscos.
Marchando la infinidad de esta madrugada
que nos emborracha sin luna.

Emisoras de radio jugando con nosotros.
Un gemido en cada interferencia.
Escupimos el humo del tabaco
y los altavoces escupen el mejor sonido.

Ventanas con las hojas abiertas,
brisa con olor a mar.
Ojos cerrados,
pieles hambrientas.

Despertar de golpe,
ovacionar al insomnio.
Quedarnos tan silenciosos y desnudos
como una noche de noviembre.
Y volver a buscarnos los labios.
Y volver a viajarnos.
Y volver la mirada hacia el techo
mientras observamos con las manos
el mejor lienzo.

Que quepa todo lo bonito
en tu cuello.
Que quepan los parques,
los conciertos,
las patatas bravas con amigos,
el penúltimo chupito de la noche.
Y esta madrugada.
Que siempre haya hueco para toda nuestra desnudez.

7 comentarios:

guille dijo...

Me encantan tus poesias. Eres un descubrimiento sugerente.

Un buen truco poner lo mismo en todas las papeletas, y una elección fantastica.

Si, es quizá la única razón que me llevaría a ovacionar el insomnio.

Y si, volver a buscarnos los labios y volver -una y otra vez- a viajarnos con las manos.

Que sueme el rock, que esten frías las bebidas, que nuestros cuerpos desnudos regalen placer a quien nos acompaña.

lopillas dijo...

Yo creo que este año viajaré de la cima de su empeine a la cala de su nuez. Ida y vuelta para dos.
Bella prosa. Saludos

Rafael dijo...

La espontaneidad hacen que estos versos se lean como si estuviéramos mirando un pasaje normal de la vida cotidiana. Felicidades.
Un abrazo en la tarde.

Amapola Azzul dijo...

Sí, por lo menos que no se esconda el alama, y luzca así de bonita, besos.

Sara O. Durán dijo...

Muy divertidos versos, mne encantan!!!
Abrazo.

Elendilae dijo...

Aquí cabe todo. En tu sombrero, en tu rincón, en tu poesía... Cabe todo lo maravilloso. ^^

Un besito

Anónimo dijo...

beautiful blog kisses