Vuelvo a casa caminando de puntillas, no vaya a ser que se despierten los poetas.

8 jun 2014

Así es mirarte de cerca




Como ser una niña en la boda de una tía lejana
que escucha Extremoduro en misa
con los auriculares puestos.

Como que el amor de tu vida
se duerma en tu cama
con una mano en tu teta derecha.

Como apoyar los pies
en la cornisa del séptimo piso
sabiendo que vendrá alguien por detrás
para empujarte hacia la vida.

Como una pintada en la fachada
de la casa donde vives con tus padres
en la que se lee
“sólo quiero follar contigo”.

Como la única ventana
que conserva el cristal intacto
en la fábrica abandonada de miel.

Como un crucigrama
que se completa con la palabra “música”.

Como Dalí pintándote
enredado en las patas de sus elefantes.

Como ser el cliente un millón
del supermercado del barrio
y que te obsequien con suministro de cerveza vitalicio.

Como ver tu nombre
en la cabina de un camión
que pasa a toda velocidad en dirección contraria
por la Nacional X.

Como que el flequillo no se te despeine nunca.

Como llegar a casa con hambre
y acordarte de que ayer te llevaste un táper
con comida de casa de la abuela.

Como que no te pare nadie por la calle
para hacerte una encuesta.

Como fumar en la bañera.

Como lamer el palo de un helado.

Como que alguien se te declare
sin ir borracho.

Como esnifar la vida de golpe,
ponerse hasta el culo de experiencias.

Como estar en el Sáhara
y en la Antártida
al mismo tiempo.

Como resucitar.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Ese emoticono que aplaude. Pues ese, muchas veces.

Elendilae dijo...

Como leerte.