En las
páginas de contactos
del
periódico
no hay
ninguna musa que yo pueda pagar.
Así que he
vuelto a recaer en la tuya.
La musa que
me quita la alfombrilla antideslizante
de la bañera
y hace que
me golpee la cabeza
contra el
grifo de agua caliente.
La musa sin
complejos corporales
madre de
Caín,
que se pasea
desnuda
únicamente
cuando tiene claro que alguien puede verme llorar.
La musa que
no te ha olvidado
a pesar de
los arañazos
los
corazones importados
las gotas de
otros aspersores.
A pesar de
eso
o por eso
no te ha
olvidado.
La musa que
me lee tu cuento
cada noche,
musa árbol
que crea sombras terroríficas
en la pared
de mi habitación
y no me deja
dormir.
La musa
cuervo
musa araña
musa
serpiente sin cascabel
que se
acerca despacito pero directa
como tú al
culo de otra
a los
dientes de otra
a los poemas
de otra.
La musa
virus
musa enfermedad
sin tratamiento
musa inmune
a cualquier vacuna.
La musa
cielo
que me
recuerda a diario
que
preferiste las alas
de otro
ángel caído.
La musa
barata
gratuita
que sólo me
cobra llevándose la piel de mi espalda.
La musa que
no te guarda rencor
la musa
imbécil.
4 comentarios:
Solemos tropezar en la misma piedra, dicen y en la realidad no aprendemos nunca a sortear los obstáculos.
Un abrazo.
Precioso, como siempre :)
Si pudieras sacar un huequecillo y echarle un vistazo a mi blog...
teresamunnoz.blogspot.com
Gracias!
Increíble Nerea
Todo con la otra uffff :(
Y tu no eres imbécil nena, las cosas pasan porque tienen y deben pasar más nada.... besos :*
Publicar un comentario