Llueve.
Hay una camisa que no quiere existir
sobre tus hombros.
Que quiere ser en el suelo
de tu habitación,
de nuestra habitación,
o en el de la cocina.
La humedad de la lluvia tiene
mucho que envidiar a la frescura
de tu saliva inundando mi cuello
y mis uñas pintadas.
Es el penúltimo día de febrero
y no te estoy besando, qué raro.
Me conformo con versarte,
con traerte esta noche desde lo más profundo
de la oscuridad de mis letras.
Voy a traerte a un colchón que se muere
por vernos en horizontal.
Qué desastre la ropa en tu cuerpo,
qué poesía tu desnudez.
12 comentarios:
Nerea, te escribo de parte de la Revista PERIPLO (www.revistaperiplo.com), ¿podrías dejarnos un correo para escribirte? O bien escribirnos a info@revistaperiplo.com
Saludos cordiales,
v.
una maravilla leerte.
gracias y enhorabuena por tu poesía.
un saludo.
qué desastre la ropa en tu cuerpo...
Bonita descripción la que dejas en tus versos.
Un abrazo y feliz día.
Wowww...... tantos piroposss, mira, te daré otro... que lindos tus pantalones, se verían lindos en el piso de mi dormitorio ;) jajajajaja
Besitos Nerea :*
Magitral Nerea y muy sutil. Un beso :)
Precioso, de verdad, un encanto.
Mira qué suerte, te escriben desde una revista. Aquí hay talento!! pero eso ya lo sabíamos todos ;)
Un besito
Cada escrito es un suspiro para el que lo lee, una maravilla. Precioso.
Si sin duda la poesía es una hermosa desnudez y la desnudez una bella poesía y una desnudez con barba eso es ..es ,,Ah sí "un San José"
Besos.
Un placer leerte, recién di con tu blog y mira que me quedo si me lo permites.
Cuántos anhelos bajo la lluvia, lluvia de pasión, lluvia de sentires.
Un cálido abrazo.
Hola!, He visto tu Blog y es sencillamente genial
Te sigo, ¿Devuelves? ♥
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